-
Arquitectos: OAOB architecture
- Área: 2200 m²
- Año: 2022
-
Fotografías:Alberto Amores
-
Proveedores: EQUITONE, Alucobond, Arcelor Mittal, Holcim, Tarkett
Descripción enviada por el equipo del proyecto. OAOB Arquitectura, proyectó este pabellón polideportivo y sus espacios exteriores, se encuentra en Avenida de la Ilustración, frente a La Vaguada, pasa desapercibido camuflado entre el asfalto y la vegetación, arboles plataneros que arrojan sombras orgánicas sobre su fachada. Un edificio sencillo pero completo, bien implantado. Ubicado al suroeste de la parcela del colegio ya existente, la propuesta de Alejandro Cirugeda y Belén Valencia, se desarrolló en torno a dos conceptos clave: Maximizar el aprovechamiento de los espacios exteriores del colegio, utilizando el volumen del pabellón para re-configurar y mejorar el acceso al recinto.
El pabellón crea una gran plaza de juegos, y una pista para correr rodea el edificio, el emplazamiento elegido para el pabellón, estructura el resto de espacios al aire libre, optimizando las circulaciones. Generar un edificio conciso y eficiente, satisfaciendo los requerimientos presupuestarios de la propiedad, mediante la eliminación de elementos prescindibles, concentrando recursos de forma estratégica para crear un edificio acogedor y confortable, con identidad.
La solución de fachada y cubierta es uno de los aspectos más interesantes del proyecto, un sistema modular industrializado, que consigue resolver los requerimientos técnicos y estéticos, por dentro y por fuera. La hoja principal de fachada y la base de cubierta, son de chapa perforada, que además sirve de acabado interior fonoabsorvente, tras sus perforaciones se encuentra el aislamiento térmico que funciona también como solución acústica.
Estos paneles de chapa perforada y grecada funcionan estructuralmente en fachada, y son base para la hoja exterior, una piel geométrica de Equitone, blanca y con diferentes relieves entre los que se esconden figuras del Tangram, para que los estudiantes desarrollen su imaginación cuando ven el edificio a cierta distancia. En esta hoja exterior también se ha jugado con distintas texturas y reflejos en las partes más bajas, rompiendo la gran escala del edificio, buscando generar interés e interacción por parte de los pequeños usuarios.
Del mismo modo se han evitado los elementos constructivos prescindibles para las instalaciones, trabajando en el diseño de su trazado y quedando todas vistas de manera organizada, pasan ser un elemento muy característico de los espacios, y ayudan a la lectura del edificio. Esta sinceridad constructiva además de evitar aumentos innecesarios en el presupuesto, sirve de medio para generar una arquitectura didáctica, la construcción se ve, las instalaciones se leen, a través de su diferenciación cromática, y así se puede entender el funcionamiento del pabellón, entendiéndose el sentido de utilización de cada elemento en esta obra. Se han reservado los revestimientos para los espacios que utilizaran los mas pequeños del cole, convirtiendo estos en zonas más amables y cálidas, consiguiendo una escala adaptada.
Qué mejor espacio que uno para el ocio y el deporte de un centro educativo, para que la arquitectura se explique a sí misma. Sin florituras ni ocultismos, un edificio sincero y explicativo, que optimiza espacio y recursos, sin renunciar a la calidad arquitectónica, ni al confort.